Sarpullido es una irritación en la piel, que se manifiesta principalmente cuando somos bebés.
Es la forma que tiene de llamar la atención de sus padres para que le hagan caso, para que estén pendiente de él y le proporcionen cuidados y cariño.
«Escúchame, hazme caso, estoy aquí».
«Dame un abrazo, necesito amor y cuidados».
Cuando un bebé presente sarpullido lo más recomendable es aproximarnos, abrazarlo y decirle palabras amorosas, ya que eso es lo que nos solicita a través de éste síntoma, porque él no sabe expresarlo ni pedirlo de otra forma.
También conviene revisar si no se trata de una proyección del padre o de la madre.
Por lo tanto, estamos hablando de un conflicto de separación de un contacto deseado del cual carecemos.
Pero, igualmente, la dermatitis o sarpullido puede ser la consecuencia de un contacto impuesto o no deseado, del cual queremos separarnos.
“El contacto con esa persona me irrita”.
Es muy importante tener en cuenta el sentido biológico de la parte del cuerpo afectada.
Cuando somos adultos nos podemos liberar fácilmente de un sarpullido expresándonos libremente y amándonos.
