La rótula o patela se sitúa frente a la articulación de la rodilla y la protege de daños.
Gracias a la rotula es posible permanecer erguido, saltar, correr, trotar y caminar, entre otros movimientos.
Actúa como punto de apoyo.
Es el hueso del futuro, nos indica desvalorización respecto al futuro, los proyectos, la dirección profesional, afectiva, etc.
Si tengo afectada la rótula me indica que estoy viviendo un conflicto de opresión, de alguna manera, me siento asfixiado por la familia.
Me niego a ser el punto de apoyo de otra persona, ya no quiero ser quien articule esta situación.
Me duele tener que ceder ante los demás, tener que aceptar las cosas que los demás me piden.
“Mi familia me obliga a…”,
“Me equivoqué al elegir a tal persona… y ahora me obligo a permanecer con ella)”
La rótula está vinculada con el futuro, con no poder o no tener derecho a organizar el futuro.
Hace referencia a los proyectos respecto a lo profesional o a lo afectivo.
Si siento dolor o se fractura puedo sentir decepción e irritación con relación a mis sueños o proyectos que me parecen estar fuera de mi alcance o irrealizables.
“Siento ira por no poder organizar mi futuro”, “Vivo esperando a que mi vida cambie”
A veces, debemos aprender a ceder, siempre y cuando no nos afecte negativamente o sea perjudicial para otra persona o para nosotros mismos.
El diálogo alimenta las relaciones interpersonales.
Debo tomarme tiempo para mí mismo, para activar iniciativas y poder realizar mis sueños más deseados.
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Imagen:adrianoleonardi.com.br
