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El individuo de estructura rígida está convencido de ser una persona cariñosa a la que nadie comprende, sin embargo, se muestra frío, distante, serio, que es el talante de una persona que carece de sentimientos.
Controla su energía para no entrar en contacto con la de los demás.
Detesta las convivencias grupales y huye de ellas. Le aterra las reuniones en las que las personas se desinhiben, se abrazan, se divierten y se ríen.
Al igual que se pone tenso también ante cualquier expresión de tristeza. «No os aproximéis a mí, no me toquéis».
No le importa mucho relacionarse, más bien todo lo contrario, prefiere aislarse y hacer las cosas solo, es decir, hace todo lo que puede para no implicarse.
Suele mantener siempre una distancia física y psicológica cuando está en contacto con los demás.
Es más, la persona de estructura rígida si tiene que interactuar, tanto si es hombre como mujer, prefiere relacionarse con hombres.
A nivel general, la mujer es más sensible que el hombre al que, tradicionalmente se le educa para ser más insensible, de ahí la frase tan extendida de que: «Los hombres no lloran».
Como consecuencia de haber perdido la conexión con su mundo interior, le resulta imposible vivir intensamente.
No es posible que puedan entrar en comunión con otras personas.
¿Cómo puede ser cariñosa si vive negando su mundo interior?
¿Cómo puede ser amorosa si solo se deja llevar por sus conveniencias, por su ambición?
La ambición no tiene ninguna relación con el amor, para poder amar primero ha de aceptarse a sí mismo y comportarse con autenticidad; entonces el amor brotará desde dentro y fluirá hacia el exterior.
Lo que más les llama es la competitividad, compiten constantemente, hasta cuando practican sexo.
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Imagen:grupo-pya.com
Muy buena descripción de la personalidad, gracias Joman, la tendré bien en cuenta.