El astigmatismo se caracteriza porque la imagen se ve borrosa por un defecto de la curvatura de la córnea.
El astigmatismo es la consecuencia de un conflicto de separación visual en relación con algo que veo.
Es decir, veo lo que no quiero y no veo lo que quiero ver. Son situaciones de no ver fuera lo que tengo idealizado en mi interior.
Probablemente, si tengo astigmatismo en la infancia admiraba a mi padre (real o simbólico) y por alguna experiencia que ocurrió “se me cayó del pedestal”, dejé de admirarlo.
Por ejemplo, un niño cuyo padre ha caído en el alcoholismo y, desde entonces, le grita con frecuencia y le golpea.
Ha dejado de ver la imagen de su padre cuando era amoroso y se siente separado del ideal.
“No quiero ver lo que estoy viendo” o “me siento separado de lo que quiero ver”.
“La imagen que tengo en mi interior no concuerda con la imagen real”.
De ahí, el sentido biológico es que la distorsión de la percepción me protege de la realidad, quiero admirar pero no puedo.
A partir de esta experiencia deberé estar muy atento porque experimentaré otros conflictos similares en los que admiraré a alguien pero, posteriormente, me decepcionaré.
“Tengo necesidad de admirar a alguien pero no puedo, por lo que pasó”.
El que padece astigmatismo tiene dificultades psíquicas entre la vida interior y la vida social: “busco respuestas en el exterior y no en mi interior”.
Entre uno mismo y los otros: “mi modo de actuar y mis pensamientos están en desacuerdo con mi entorno”.
Tiene dificultad para ver las cosas (o a sí mismo) como son en realidad, de una manera objetiva, ya que no las ve lo mismo para él que para los demás.
“Me niego a ver uno de los aspectos de la realidad tal como es; como no puedo cambiarla intento cambiar mi visión de las cosas, deformando la realidad”,
“Mi imagen ideal está lejos de la realidad”.
“No me gusta ver el mundo como es, me parece duro y cruel, éste mundo me resulta insoportable”,
“Quiero transformar una parte de la realidad”, “Quiero reconocer mi belleza o lo bueno que soy”, “Quiero liberarme de mis padres”, “Quiero esconder algo (personalidad, sentimientos, etc.)”, “No acepto del todo cómo soy”.
También le cuesta mucho aceptar un cambio proveniente de otro y ver si es adecuado o no para él.
Sin embargo, si el cambio lo realiza él, se adaptará de inmediato, sin problemas.
El astigmático es una persona muy susceptible, que se siente herido con facilidad.
Puede tratarse de alguien que siendo niño tomara la decisión de no dejarse influir por los demás y adoptara la actitud de ver la vida solo a su modo.
“Quiero liberarme de la influencia de mis padres o de cualquier otra persona que encuentre ofensiva”.
“Amo a mi madre/padre pero a la vez lo detesto”.
Me gustaría parecerme a él/ella, pero hay una parte que rechazo.
No me gusta su personalidad, cómo es, no me gusta ese lado, pero por otra parte me gustaría parecerme.
Sentimiento de suficiencia: “Estoy decepcionado con los otros y solo puedo contar conmigo”, “No quiero contar más que conmigo mismo”
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