
La criptorquidia es un trastorno del desarrollo que consiste en el descenso incompleto de uno o ambos testículos a través del canal inguinal hacia el escroto.
Probablemente la criptorquidia ocurre durante el embarazo, uno o los dos testículos se esconden para “simular” que no somos del sexo deseado, por la madre o el padre, prefieren una niña.
Otro sentido puede ser el de “esconder los testículos” para no mostrar la capacidad reproductiva.
En estos casos, debo mirar mi árbol genealógico y buscar, en mis dobles, programas heredados de no tener derecho a reproducirme, a no tener hijos.
“No debo procrear”
“No quiero ser papá”
Cuando los testículos no bajan o permanecen casi ocultos, más tiempo de lo normal, nos expresa que el niño no ha mantenido una relación afectiva con el padre.
La mayoría de las veces, hace referencia a padres autoritarios, duros, distantes, fríos, castrantes, con el que no ha podido mantener ningún tipo de comunicación.
O, tal vez, nos indica que el niño ha sido abusado, tocado o violado por su padre.
Conflicto de castración. Padre demasiado poderoso o con amantes, incestuoso o violador.
En el adulto, la criptorquídia nos habla de conflictos relacionados con la reproducción.
He de analizar todas las situaciones en mi vida, en el último año, relacionadas con el proyecto de tener un hijo, miedo a tenerlo, etc.
“No quiero ser papá o no quiero ahora”
“No fui capaz de darle un niño a mi pareja”
Y, además, he de buscar conflictos referentes a cómo es la relación con mi padre o cual es la actitud de él, ante el sexo y la reproducción.
Si desea conocer más acerca del origen emocional de las enfermedades o saber acerca del propósito del alma puede adquirir mis libros haciendo clic sobre el enlace de Amazon:
Imagen: sites.google.com