Origen emocional de la CIRROSIS

 
La cirrosis es el resultado al que llega el tejido hepático tras haber sufrido múltiples procesos inflamatorios.
Se produce un endurecimiento del tejido que se ha ido desgastando, para poder ser más resistente antes de que siga cambiando y termine perdiendo definitivamente su función.
Aparece en fase de reparación o de aceptación de un conflicto de pérdida o carencia sufrido mucho tiempo atrás:

Seguramente, si tengo cirrosis siento que: “me quitaron algo injustamente”, algo que era mío y la vida, Dios, otra persona, etc. me lo quitó, (mamá, casa, dinero, esposa, hijo, etc.).

La persona puede tomar alcohol porque enviudó, se divorció, fue abandonado, etc. pero el verdadero conflicto que daña su hígado es el de “me quitaron”.
La cirrosis también puede estar relacionada con el odio que sentimos hacia una madre considerada como tóxica:
“Prefiero ahogarme en alcohol antes que enfrentarme a mi madre”. Rencor con miedo, con desvalorización, desprotección o separación.
Del mismo modo, puede provenir de un conflicto de falta de información sobre nuestros orígenes, sobre nuestra procedencia:
“Vivo sin saber de dónde provengo”.
Suele tratarse de personas que han sido adoptados o, tal vez, porque la madre murió siendo él muy pequeño o, quizás, porque nadie le ha hablado sobre su nacimiento y sobre sus raíces.
La persona enferma de cirrosis suele estar muy atado a su pasado y tiene un profundo miedo a cambiar: Soy demasiado apegado a mis cosas, dinero, objetos, etc.,  y me cuesta mucho cambiar.

Me siento incapaz de crecer, de avanzar en la vida, de renovarme, de adaptarme a ambientes nuevos a responsabilidades nuevas, etc.

Conflicto de bocado tóxico. Miedo.
Es muy importante, para las  personas afectada de cirrosis, liberar las emociones de ira y rencor que tienen reprimidas.
 

Si desea conocer más acerca del origen emocional de las enfermedades o saber sobre el propósito del alma puede adquirir mis libros haciendo clic sobre el enlace de Amazon:

Imagen: asssa.es

Deja una respuesta