La sequedad en los ojos o síndrome del ojo seco es un síntoma que es bastante habitual.
Ocurre cuando los ojos no producen suficientes lágrimas para mantenerse húmedos o cuando las lágrimas no cumplen correctamente su función.
Afecta, más o menos, según las estadísticas casi al 30% de la población, aunque a nivel general se da más en las personas mayores.
No es un síntoma grave, pero sí que causa molestias y algunas alteraciones que pueden ser importantes.
¿Podíamos preguntarnos qué conflicto emocional he vivido o estoy viviendo para que se manifieste este síntoma de sequedad o falta de lubricación, de lágrimas en mis ojos?
En general, el síndrome del ojo seco refleja el estado de enfado y de rabia que siento por algo sucio que he visto.
“Ya no hay alegría en mis ojos”.
Además, está relacionado con una persona a la cual amo de verdad, la amo profundamente. No me lo esperaba.
Por eso lo que he visto es un hecho tan doloroso e indignante para mí que, inconscientemente, me niego a verla de nuevo con los ojos del amor y, por consiguiente, me opongo en lo más profundo de mí ser a perdonarle.
Incluso, a veces la herida puede ser tan profunda que primero muerto antes que perdonarle. Aunque le diga “te perdono”, no es cierto, la furia sigue instalada en mis ojos.
Asimismo, el ojo seco puede deberse a que me impido llorar, me niego a expresar mis emociones. “Está prohibido llorar”.
No puedo sufrir frente a los demás, tengo que mantenerme insensible, no debo mostrar mis sentimientos y permitir que otra persona los vea.
El síntoma del ojo seco afecta a personas que, de alguna manera, han llorado mucho en su infancia o en su adolescencia y un día determinado prometieron que ya no iban a llorar más.
“Me niego a llorar y a perdonar”.
Una característica muy importante a tener en cuenta es que los que padecen este síntoma son muy intolerantes e intransigentes.
Tienen dificultades para aceptar a los demás tal como son y a veces, lo ven con rabia cuando no hacen lo que lo que ella quisiera que hicieran.
¿Qué he visto que me ha hecho sentirme herido y por lo cual me niego a perdonar?
Reflexión para recuperar el estado normal: nadie me hace nada, todo surge en mí y se diluye en mí cuando vea el amor que está siempre presente en mí.
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