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En la relación de pareja en la estructura de rechazo se puede decir que su corazón se encuentra ausente.
Se advierte una fuerte tendencia a evitar relaciones íntimas y sentimentales.
En una relación de pareja rechazan asumir responsabilidades y ante una propuesta de compromiso, desaparece sin dar explicaciones.
Hay que evitar cualquier amenaza para el ego y la entrega lo es. «Puedo existir si no necesito intimidad».
Ante su pareja adopta una actitud pasiva y suele tener la tendencia a esconderse a la sombra de ella, para que lo proteja frente al hostil mundo exterior.
Al estar desconectado de su propia esencia, tratará de apoyarse en la identidad de su pareja para sentir que existe.
Aunque esto le hace perder el sentido de su existencia y vivir en una ilusión de relación.
Si bien esta situación no ocasiona conflicto, la pareja sí siente la ausencia, el vacío que tiene frente a sí y acaba por marcharse y abandonar la relación.
No obstante, la persona fraccionada (rechazada) se refugiará en su mundo especial de sueños, ideales y fantasías para tratar de evitar el dolor y el sufrimiento.
Procuran evitar sentir cualquier emoción, recurriendo sistemáticamente a la evasión.
Si por cualquier circunstancia se ve desbordado por sus emociones, mostrará una gran fragilidad y puede ser muy vulnerable.
Como la mayor parte del tiempo lo pasa en las nubes, evitando así afrontar la realidad de la vida, proyecta ilusiones idílicas desde donde todas las cosas (incluyendo su pareja) se perciben extraordinariamente hermosas.
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Imagen:psicologia-online.com