Se considera estreñimiento cuando las heces permanecen demasiado tiempo en el intestino y el ritmo de la evacuación intestinal disminuye de manera variable, con heces duras y secas, y difícil eliminación de las mismas.
El estreñimiento aparece por la excesiva absorción de agua en el intestino. El agua siempre hace referencia a la madre (el primer referente, procedemos del medio líquido del útero de nuestra madre).
En muchos casos, el estreñimiento muestra un trauma latente e inconsciente por el que la persona sigue buscando el amor materno que no recibió en la primera infancia.
La falta de agua (símbolo de la madre) en sus heces, equivale al anhelo de la madre.
“Quiero conservar el amor de mi madre”, “No puedo desapegarme de mi madre”, “Estoy esperando todavía el amor de mi madre”
Puedo tener estreñimiento por retener algo sucio: Viví algo que me negué a olvidar a perdonar a liberar, a dejar ir y mi mente lo ha relacionado con no querer soltar una porquería, no suelto mi porquería.
“Eso no lo perdono”, “Eso no lo olvido”, “Esa marranada no la suelto”, “Quiero retener…”, “No quiero perdonar…, quiero guardar en mi”, “No puedo retener a la persona que quiero”
¿Qué porquería no quiero soltar? (Puede tratarse de algo real o simbólico).
Para descubrirlo he de revisar mis relaciones familiares, sociales, laborales, sentimentales, etc.
Probablemente, si tengo estreñimiento debo buscar traiciones, desengaños, manipulaciones, infidelidades, promesas rotas, mentiras, engaños, personas que nos hirieron, etc.
Y son cosas que seguimos recordando y rumiando, es decir, diariamente seguimos dándole vueltas y vueltas en nuestra mente.
El estreñimiento también puede estar relacionado con el concepto de “temor a soltar”, por la negativa a abandonar viejas ideas.
”Fui educado bajo un riguroso orden y limpieza y no debo ensuciar con mi porquería”, “No puedo cambiar mi cultura, no puedo adaptarme a lo nuevo”, “Me siento atrapado, bloqueado, esclavizado, dominado”
El estreñimiento va acompañado por una actitud testaruda de continuar aferrándose a una situación, a pesar de saber que de ella, no puede derivarse nada bueno.
“Tengo que seguir con esto, aunque sepa que no me va a gustar”, “No sé cómo seguir adelante”, “Esto no conseguirá mejorar, pero no lo dejaré”, “Quiero guardar, controlar todo a mi manera”
El estreñimiento también expresa avaricia y tacañería. Al afectado le cuesta mucho dar e intenta a toda costa retener y conservar sus cosas.
Se aferrarse a sus bienes materiales por si llegara a necesitarlos algún día, pues “más vale pájaro en mano que ciento volando”.
Incluso, si en algún momento se siente obligada a dar algo, lo dará para no sentirse culpable, pero interiormente no se sentirá satisfecha porque ella siempre prefiere guardarlo para sí.
Del mismo modo, se pueden retener las heces por un conflicto de miedo a “no poder eliminar un bocado”.
Ejemplo: una casa, un terreno, un coche, etc., que hemos puesto a la venta y que no se puede vender. “No puedo encaminar esto que es mío, no puedo darle salida”
Asimismo se puede manifestar tras un conflicto de identidad en el territorio.
La persona se ve invadida por sentimientos de no poder marcar “su” territorio, de estar sometida a control y vigilancia, ya sea en la familia o en el trabajo.
“Me siento separado de mi territorio”, “No tengo un lugar específico en mi territorio”, “No sé quien soy dentro del territorio”, “No puedo marcar este territorio como líder, mi padre es el líder”, “Fui evacuado de mi casa, mi ciudad, mi país”
Tener este síntoma nos habla de personas vulnerables, rencorosas, dependientes, nerviosas, aprensivas, preocupadas, que suelen depositar su atención en hechos negativos del pasado y se dejan afectar por ellos.
Estreñimiento del viajero: El sentimiento es de no sentirse en “su” territorio y se manifiesta cuando se viaja. Suele afectar mucho más a las mujeres que a los hombres. “No estoy en mi casa y no puedo marcar el territorio (defecar)”
Enfermedad de hirschsprung: Estreñimiento congénito. “Es preciso retener, guardar en mí, en mi vida, un pedazo muy indigesto y muy despreciable y, además, me siento impotente y sumiso”.
Si ninguno de los conflictos anteriores está relacionado conmigo tengo que revisar mi árbol genealógico y comprobar si alguno de mis dobles fue el que los vivió y yo estoy repitiendo el programa.
Además tengo que buscar historias de bebés que se han quedado sin madre desde muy pequeños o han sido abandonados, regalados, dados en adopción.
Así como historias relacionadas con abandono en el clan, con personas que huyeron del clan o lo abandonaron.
También he de revisar mi proyecto sentido y buscar si mi madre o mi padre vivieron algunos de estos conflictos emocionales previo a concebirme o si ellos padecen estreñimiento, porque puedo haber heredado la emoción de “no poder soltar” y yo haber asumido que es un problema mío, cuando no lo es.
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Imagen: disciplied.com
menos mal que a mí no me pasa….sino…cuántas cosas tendría que cambiar!!
gracias por tanta información interesante..
besosss
Me gustan tus escritos, son interesantes i les das un punto de lectura diferente. Però quiero preguntarte, ¿si uno es estreñido desde que andaba con pañales? La consciencia en esa edat dudo que sea nada de lo que cuentas aquí. Lo pregunto no con maldad, simplemente porque és algo que a mi me pasa y que mi madre me ha explicado.
Un saludo!
Fijate que al volver a leer este artículo que ya había leído en tu libro y relacionarlo con el tema de las alergias, veo que ambas situaciones tienen en común como causa la inseguridad entre otras cosas. Mi hija las padece ambas, así es que voy a prestarle más atención a sus miedos. Pudiera ir por ahí la cosa. Un abrazito y gracias por tus enseñanzas. Saludos