
La psoriasis se manifiesta tras una separación conflictiva, de estar o no estar en contacto con algo o con alguien, por muerte, separación, traslado, despido, divorcio, etc.
La pérdida de contacto, como ocurre también en el reino animal, supone un conflicto muy importante para la persona que lo padece.
La psoriasis aparece cuando se presentan dos conflictos de separación simultáneos a causa de los cuáles yo me siento desprotegido.
La causa de psoriasis serán siempre dos conflictos diferentes entre sí, pero relacionados.
O bien, uno de ellos, es consecuencia del otro.
Siempre ocurre de la siguiente forma: Uno de los conflictos me agrede, es decir, me obligan a separarme de algo en contra de mi voluntad.
El otro conflicto me hace vivir una separación dolorosa y una nueva vida. Uno de esos dos conflictos emocionales, está latente, activo, presente en mi vida diaria porque no lo he podido superar. Lo sigo sufriendo.
El otro conflicto, ha dejado de estar, está en fase de curación. Lo viví, lo sufrí, pero de algún modo lo he superado, comprendido, asimilado y liberado.
Ejemplo: Un niño cuyos padres se separan, venden la casa donde vivían y se traslada a vivir con su madre a una nueva casa, en otro pueblo cercano.
Para generar psoriasis el primer conflicto grave, doloroso, es la separación de sus padres y de su casa, donde se sentía protegido.
El segundo, como consecuencia del anterior, es que se separa de sus vecinos, de sus amigos, de su profesor, de sus compañeros de colegio.
Y, además, se tiene que enfrentar a un nuevo conflicto, a una nueva experiencia en una nueva escuela, con un profesor nuevo, con compañeros desconocidos, con una nueva vida, en otro lugar.
Otro ejemplo: un adolescente se traslada a estudiar a otro país (separación física) donde tienen otras costumbres, otra manera de ver la vida, que no concuerda con lo que él siente (separación de si).
Por un lado me encuentro separado físicamente de mi padre, madre, familia, amigos y, por otro lado, estoy separado de mi mismo, de mis principios, de mi identidad.
Del mismo modo se puede provocar una psoriasis si yo, como padre real o simbólico, no he podido “proteger” a alguien.
Ejemplo: un niño de 10 años, cuyo padre maltrata físicamente a su madre y desarrolla éste síntoma cuando fue ingresado en un internado, ya no podía proteger a su madre.
La psoriasis representa en sí misma que he dejado de estar en contacto con algo o con alguien a causa de un conflicto. Y que dicha separación es muy dolorosa.
La psoriasis es como una coraza seca que enmascara un deseo secreto de ser amado, acariciado y protegido.
Detrás de la psoriasis el individuo siempre esconde un gran miedo a separarse de lo que ama, miedo a cambiar de dirección, miedo a vivir separado de aquello que le hace sentir protegido.
“Me siento agredido en ésta relación, atacado, herido”.
“Estoy solo y tengo necesidad de protegerme”.
¿Pero qué tipo de protección? El rol de protección tradicional lo ejerce el padre o la persona que representa la función paterna, que en algunos casos puede tratarse de la madre.
¡Me haces falta papá, ya no me siento protegido, por lo tanto me protejo yo solo aumentando el grosor de mi piel!
La necesidad de protección paterna se puede demostrar cuando el afectado se expone a los rayos solares, la mejoría es evidente.
De todos es sabido que el Sol, para el inconsciente colectivo, representa al padre.
“Cuanto más estoy al sol, más estoy en contacto con mi padre simbólico protector y, por lo tanto, me siento protegido”.
Se manifiesta normalmente en individuos hipersensibles que necesitan el amor de los demás pero, paradójicamente, sienten miedo ante un contacto y se protegen.
Tienen la necesidad de endurecerse, de meterse dentro de un caparazón que le aísla del exterior, que le protege, pero que también impide el acceso al afecto, al amor y la ternura.
Esta persona queda en situación de soledad emocional, e incluso, puede sufrir un problema de identidad ya que no se siente reconocida por lo que es. Le resulta difícil aceptar quién es en ésta vida.
Por eso da la impresión que quiere renovar su piel, porque no se siente bien en ella (conflicto de separación de sí mismo).
”Intento protegerme y la mejor forma de hacerlo es separarme de mí, ser otra persona”.
Si desea conocer más acerca del origen emocional de las enfermedades o saber sobre el propósito del alma puede adquirir mis libros haciendo clic sobre el enlace de Amazon:
excelente entrada, muy interesante, me encanta tu blog!
Gracias!!!
Este era el enfoque que buscaba, no solo médico.
Ahora, cómo hacer el trabajo interno para sanar?
Esa es la tarea.